La igualdad constituye un pilar fundamental en la educación y un compromiso irrenunciable para todo el profesorado. Promover entornos inclusivos y libres de discriminación no solo responde a un deber ético, sino también a una obligación legal recogida en nuestro marco normativo. La Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres, establece medidas para garantizar la no discriminación por razón de sexo en todos los ámbitos, incluida la educación. Asimismo, la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación (LOE), modificada por la LOMLOE, integra entre sus principios la equidad y la igualdad de oportunidades como elementos esenciales del sistema educativo.
En el contexto de la formación docente, abordar la igualdad implica dotar al profesorado de herramientas conceptuales y prácticas que les permitan identificar desigualdades, prevenir situaciones discriminatorias y fomentar una cultura de respeto y justicia social en el aula y en la comunidad educativa.